FRONTIS DE INGRESO AL TEMPLO COLONIAL DE ARANI, DECLARADO MONUMENTO NACIONAL, Foto: Neil Laime
FRONTIS DE INGRESO AL TEMPLO COLONIAL DE ARANI, DECLARADO MONUMENTO NACIONAL, Foto: Neil Laime
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Por devoción mestiza a la Virgen Morena María de La Bella de San Bartolomé de Arani, la construcción de su Iglesia demandó años de sacrificio y fallecieron en ese cometido tres obispos enviados por la administración del Obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani.
Edmundo Arze
1 de septiembre de 2024
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VIRGEN MARIA LA BELLA DE SAN BARTOLOMÉ DE ARANI

Después del gran imperio del Tiahuanaco y la invasión aimara, Arani formó parte de la red vial que unía la zona de los andes con la cuenca amazónica para el intercambio comercial. En ese momento fue un lugar de paso obligado para los contactos y relaciones interétnicas con las nacientes del rio Mamore y Mojos.

Además, Arani formaba parte del gran valle de Cliza donde habitaban etnias locales o señoríos étnicos como Chues, Kotas, (indios flecheros), Turpas, Soras y Ciacos Sajsa de Arani; grupos humanos que se dedicaban al cultivo del maíz.

PRESENCIA ESPAÑOLA

En el siglo XVI, los primeros españoles que llegaron al valle central de Cochabamba, entre 1542 y 1558, después de la batalla de las salinas, son pobladores castellanos.

Cliza y Arani formaban un villorio y el primer poblador castellano que se afincó, fue el capitán Pedro Xuavez y Cermeño con su esposa Dña. Francisca Hernández Cornejo, mujer mestiza nacida en el Perú (Arequipa), quienes compraron las tierras de “Harane” o Arani y Sajsa en una subasta pública el 6 de noviembre de 1563.

Las tierras pertenecieron los Kuracas del repartimiento de Pojo y la compraron por la suma libremente convenida de 560 $. de buena plata ensayada y marcada de ley para luego tomar posesión de las tierras el 17 de noviembre de 1563. (Documentos del archivo histórico municipal Ar. HMC. Vol.  6-ECC).

Al pasar el tiempo doña Francisca Hernández al quedar viuda funda una Capellanía Eclesiástica en su hacienda de Arani, el 5 de diciembre de 1609 por el principal de 4 mil pesos. Esta Capellanía fue en honor y advocación a la Virgen de donde se deduce que fueron los primeros devotos de la Virgen María la Bella. Primeramente, construyen en su honor y para su veneración una capilla donde existen indicios de su construcción.

En el año del señor de 1664. llegó al asiento o pequeño villorio de Arani, Fray Bernardino de Cárdenas y Ponce, obispo de Santa Cruz de la Sierra y fijó residencia y sede administrativa del Obispado de Santa Cruz de la Sierra, en Arani donde  empezó a dirigir la construcción de la iglesia que fue por etapas en honor a la Virgen María La Bella.

IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI

OBISPOS Y LA GRAN OBRA

La gran obra comenzó por los cimientos y cuando la construcción llegó a la altura de la cripta, monseñor Bernardino de Cárdenas falleció el 20 de octubre de 1668. Solo por los años de 1743 a 1745 se termina la construcción de la iglesia durante la administración episcopal del obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani, monseñor su ilustrísima don Miguel Bernardino de la Fuente y Rojas.

El nuevo obispo mandó a continuar la construcción, siendo además benefactor de la obra. En su testamento destinó plata suficiente para la construcción del templo siendo su albacea testamentario y ejecutor de su última voluntad el corregidor y justicia mayor de la Villa de Oropesa, el Gral.  Bartolomé Fiorilo y Pérez (ARH.M.C.)

Pero, la obra tampoco se terminó totalmente por el fallecimiento del obispo el 15 de julio de 1743.  Hasta 1749, recién se terminó de construir el Baptisterio a cargo del arquitecto don Lucas de Cabral.

Luego, otro nuevo obispo, su ilustrísima monseñor Don Juan Pablo de Olmedo, que ejerció el cargo desde el año de 1745 a 1755, se encargó de dirigir la construcción de la torre y unas siete tiendas en la plaza, así como otros ambientes, pero tampoco se terminó por completo la edificación de la torre.

Sólo bajo el gobierno eclesiástico del obispo auxiliar del Obispado de Santa Cruz de la Sierra y primer párroco de Arani, su ilustrísima monseñor Dr. don Rafael de la Vara de la Madrid, que ejerció el cargo de 1780 a 1806, se concluyó la construcción de la torre entre 1783 a 1788.

 Para este trabajo se contrató al arquitecto don José Mejía y en 1785 se mandó a fundir una campana con el fundidor cliceño Don Vicente Chamarro.

Entre 1803 y 1804 fue dispuesto la fundición de las otras campanas, una mediana y otra mayor. Para ello se contrató al fundidor don Gregorio del Ramo y así fue concluida la Basílica de Arani Santuario Virgen Bella y bajo la protección del apóstol San Bartolomé. 

FACHADA NEOGÓTICA

La Iglesia tiene características peculiares, un modelo de Cruz Latina con Cúpula sobre el Crucero, parece hallarse cubierta por azulejos de varios colores trabajados en Huayculi, Anzaldo y Toco.

La fachada es neogótica es de principios del siglo XIX y la torre se encuentra separada de la iglesia que fue construida en el siglo XVIII.  En su interior se conservan admirables retablos estilo barroco; el altar mayor cubierto en su parte central por arcos de plata repujados y también ornamentados con pan de oro. Tienen los estilos Romano y Mudéjar, también   guardan valiosísimas pinturas al óleo con distintas advocaciones religiosas y retratos de los obispos de Santa Cruz de la Sierra. 

La sede episcopal, residencia y administración del obispado de Santa Cruz de la Sierra en Arani duró hasta el 25 de junio de 1847.

Según Crónicas Franciscanas, Arani tuvo una alta cultura colonial que en su día moraron ilustres prelados o gobernadores eclesiásticos, sabios y pastores gentiles. Hoy en día su gran iglesia se ha resignado a ser solamente un templo parroquial y en lugar de obispos sólo tiene párrocos. 

La provincia de Arani es de paisaje variado donde se yergue el culto por la Virgen la Imagen   de María La  Bella por  lo que ha sido y lo es  el imán de atracción de los  fieles  católicos en  romerías  que  llegan a su  Santuario con pasantes, alféreces,  prestes y  priostes.

EL ORIGEN DE LA DEVOCIÓN 

Se origina en la   devoción ibérica que llegó a Arani en el siglo XVI o principios del siglo XVII. Al respecto existen algunas teorías, unos entendidos dicen que se trata de una réplica traída de la Virgen de los Navegantes del puerto de Lepe de España y otros refieren que es   muy parecida a la “Bella Asunción” de los ojos grandes de Lugo del norte de España quienes trajeron la imagen en bulto como resultado de la transferencia migratoria al nuevo mundo  durante   los  primeros  años de la  colonización y evangelización.

La Virgen María Bella Asunción de Arani es de Color Morena y la devoción a la imagen santa se popularizó en el valle de Cliza o el Valle Alto, pero no sólo entre estos pobladores sino también entre devotos del oriente principalmente de Santa Cruz de la Sierra, que en calidad de peregrinos llegaban al Villorio de Arani desde los    primeros días de agosto.

Al respecto, el gobernador intendente (F. de Viedma) en el tiempo colonial en su informe expresaba lo siguiente:

“Se  venera  una  imagen de María Santísima  con el título de nuestra  señora  la Bella  a quien toda   la provincia  y  sus inmediatas  tienen  particular devoción y  vienen muchas  gentes, en memoria a  cumplir  sus promesas  el día 24 de agosto se celebra  una  fiesta  solemne  en el culto de esta  sagrada  efigie  la que atrae  innumerable  concurso de gentes  y  con este  motivo  se  hace  feria  de géneros de Castilla  y de la tierra; y con las  limosnas  que  contribuyen  los  fieles  tienen la  fábrica y una dotación rica”. 

También en algunas crónicas coloniales refieren que llegaban devotos procedentes de Potosí y los peregrinos participaban en el inicio de la festividad con las vísperas del 14  de  Agosto  en la noche y la solemne misa   y procesión  del 15  de  agosto, luego el 23 de agosto día  de  feria  y calvario.

En la noche, la velada a la Virgen contaba con presencia de indígenas con velas encendidas y la adoración a la imagen con el ritmo de sus cajas, quenas y jula julas.

El   día 24 de agosto, la fiesta patronal de la parroquia en honor al apóstol San Bartolomé, era precedida de misas solemnes bendiciones y procesiones, costumbres traídas por los españoles que heredaron los rituales de la antigua Roma.

FESTIVIDAD DE HOY

El 24 y 25 de agosto, actualmente, está matizado por la participación de danzarines inmersos  en el rico folklore místico  espiritual  y  cristiano convertido en una  rara  hibridación  o mestizaje  cultural religioso que  dieron  lugar a las fiestas paganas con  “misachicus” o presteríos  donde  no  falta la  “comida especial y la chicha especial.

 La festividad es de algarabía y  regocijo popular con  bailes, juegos pirotécnicos o lo  que  llamaban  antes  las  luminarias.  En las ferias  de agosto en Arani   se  vende  gran cantidad de cántaros ollas   y  enceres de  cerámica producidos por manos de alfareros  indígenas, venta de pan empanadas,  bizcochos, maní, watías o  calabazas al horno bateas  de  madera,  tutumas, cucharas de palo, instrumentos de labranza, etc. 

Lo pintoresco y clásico en Arani durante la  fiesta  de  agosto es la imponente presencia de  “las cholas”, ellas son  toda una institución, el alma  de  la raza  del pujante  mestizaje  étnico cultural y ultramarino.  Se las ve en el mercado realizando transacciones económicas utilizando “El Trueque” para obtener productos agrícolas que se comercian en esa época del año. 

Terminada la colonia, en la República se continuó con la costumbre en el siglo XX y esta fiesta al pasar el tiempo tuvo distintos matices según referencias registradas en el periódico “El Comercio” de 3 de septiembre de 1901.

“Se  hallan de vuelta  todos  los  industriales  que se  trasladaron  a Arani con motivo de la feria  por la fiesta  del 24 de agosto”;  referente al mismo  tema, la  crónica  escribía  lo siguiente  para la fiesta  de  Arani:  “numerosos pueblos y no pocos  comerciantes  se  preparan  a  trasladarse  a Arani  con  motivo de  la  fiesta que  celebra  esta  localidad  el 24 presente y la  feria  que  sigue  a la fiesta  dura  ocho días  y como  es  sabido  se  realizan en ella  importantes transacciones comerciales” 

De igual forma, el periódico  “El Heraldo” de 11 de agosto de 1909  informa:  “Que    la junta  municipal de Arani con motivo de la fiesta crea  la  plaza de ganado para la importación  de  ganado  vacuno que  estrenaría  el  14 de agosto  y para que cada sábado de cada semana se abra la feria”.

PANORAMICA DE ARANI, Foto: GAM Arani
LÍNEA DEL FERROCARRIL

En el año de 1911, Arani ya estaba unida por la línea del ferrocarril del ramal Quillacollo Cochabamba Aiquile, Tarata, Cliza, Punata y Arani.  Por esa vía llegaron los mercaderes chinos y árabes con mercaderías ultramarinas quienes también instalaban sus puestos de venta en la plaza de Arani durante la fiesta de agosto. 

Años después, en el periódico “El Imparcial” de 30 de agosto de 1945 se registraba una terrible y trágica noticia: “en ocasión de la popular y  tradicional festividad  de la  Virgen Bella; se  produjo un gran accidente en la línea  férrea a la salida del pueblo;  el  tren de descarriló, chocaron  entre sí  dos  convoyes  provocando   la tragedia por el cual se  lamentó la muerte  de muchos pasajeros  así como igual  número de  heridos”.

Al mes siguiente, durante la presidencia del Tcnl. Don Gualberto Villarroel el 19 de septiembre de 1945, la Convención Nacional declaró al templo de Arani, Monumento Nacional y en su artículo único decía: 

“Declárese Monumento Nacional el Templo Colonial de la provincia de Arani del Distrito Eclesiástico de Cochabamba conforme al Art. N° 163 de la Constitución (C.P.E.).

 Desde aquel año en que se produjo ese  fatídico accidente la  fiesta  dejó de ser fastuosa y  grande. Decayó en todo su esplendor, nunca más llegaron los peregrinos de los llanos orientales de Santa Cruz de la Sierra y de Potosí.

Ahora se ha  convertido en una fiesta  del Valle  Alto y de todos sus  parajes  llegan los  campesinos en verdaderas  romerías y caravanas   procedentes de  Mizque y  Aiquile, quienes  traen a  vender sus  productos.

 Otra caravana de devotos llega en forma organizada por familias de Sacaba cada 22 de agosto a las primeras horas de la mañana y precedida de sus autoridades ingresa al templo de San Bartolomé de Arani.

Luego de escuchar la misa solicitan en calidad de préstamo la réplica de la imagen de la VIRGEN BELLA para llevarlo con rumbo al pueblo de Sacaba donde el 22 en la noche la santas imagen es venerada en la puerta de su templo y se realiza una verbena en honor a la Virgen con participación de todo el pueblo.

 Al día siguiente, día 23, retornan al pueblo de Arani devolviendo a la imagen sagrada presidido de una gran caravana de peregrinos sacabeños. En síntesis, esta fiesta religiosa es eminentemente rural agraria.

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Referencias

Archivo histórico municipal de Cochabamba

Archivo histórico departamental de la Gobernación

Libros de fábrica de los archivos eclesiásticos de San Bartolomé de Arani.

OBISPOS Y LA GRAN OBRA

La gran obra comenzó por los cimientos y cuando la construcción llegó a la altura de la cripta, monseñor Bernardino de Cárdenas falleció el 20 de octubre de 1668. Solo por los años de 1743 a 1745 se termina la construcción de la iglesia durante la administración episcopal del obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani, monseñor su ilustrísima don Miguel Bernardino de la Fuente y Rojas.

El nuevo obispo mandó a continuar la construcción, siendo además benefactor de la obra. En su testamento destinó plata suficiente para la construcción del templo siendo su albacea testamentario y ejecutor de su última voluntad el corregidor y justicia mayor de la Villa de Oropesa, el Gral.  Bartolomé Fiorilo y Pérez (ARH.M.C.)

Pero, la obra tampoco se terminó totalmente por el fallecimiento del obispo el 15 de julio de 1743.  Hasta 1749, recién se terminó de construir el Baptisterio a cargo del arquitecto don Lucas de Cabral.

Luego, otro nuevo obispo, su ilustrísima monseñor Don Juan Pablo de Olmedo, que ejerció el cargo desde el año de 1745 a 1755, se encargó de dirigir la construcción de la torre y unas siete tiendas en la plaza, así como otros ambientes, pero tampoco se terminó por completo la edificación de la torre.

Sólo bajo el gobierno eclesiástico del obispo auxiliar del Obispado de Santa Cruz de la Sierra y primer párroco de Arani, su ilustrísima monseñor Dr. don Rafael de la Vara de la Madrid, que ejerció el cargo de 1780 a 1806, se concluyó la construcción de la torre entre 1783 a 1788.

 Para este trabajo se contrató al arquitecto don José Mejía y en 1785 se mandó a fundir una campana con el fundidor cliceño Don Vicente Chamarro.

Entre 1803 y 1804 fue dispuesto la fundición de las otras campanas, una mediana y otra mayor. Para ello se contrató al fundidor don Gregorio del Ramo y así fue concluida la Basílica de Arani Santuario Virgen Bella y bajo la protección del apóstol San Bartolomé. 

La Iglesia tiene características peculiares, un modelo de Cruz Latina con Cúpula sobre el Crucero, parece hallarse cubierta por azulejos de varios colores trabajados en Huayculi, Anzaldo y Toco.

La fachada es neogótica es de principios del siglo XIX y la torre se encuentra separada de la iglesia que fue construida en el siglo XVIII.  En su interior se conservan admirables retablos estilo barroco; el altar mayor cubierto en su parte central por arcos de plata repujados y también ornamentados con pan de oro. Tienen los estilos Romano y Mudéjar, también   guardan valiosísimas pinturas al óleo con distintas advocaciones religiosas y retratos de los obispos de Santa Cruz de la Sierra. 

La sede episcopal, residencia y administración del obispado de Santa Cruz de la Sierra en Arani duró hasta el 25 de junio de 1847.

Según Crónicas Franciscanas, Arani tuvo una alta cultura colonial que en su día moraron ilustres prelados o gobernadores eclesiásticos, sabios y pastores gentiles. Hoy en día su gran iglesia se ha resignado a ser solamente un templo parroquial y en lugar de obispos sólo tiene párrocos. 

La provincia de Arani es de paisaje variado donde se yergue el culto por la Virgen la Imagen   de María La  Bella por  lo que ha sido y lo es  el imán de atracción de los  fieles  católicos en  romerías  que  llegan a su  Santuario con pasantes, alféreces,  prestes y  priostes.

EL ORIGEN DE LA DEVOCIÓN 

Se origina en la   devoción ibérica que llegó a Arani en el siglo XVI o principios del siglo XVII. Al respecto existen algunas teorías, unos entendidos dicen que se trata de una réplica traída de la Virgen de los Navegantes del puerto de Lepe de España y otros refieren que es   muy parecida a la “Bella Asunción” de los ojos grandes de Lugo del norte de España quienes trajeron la imagen en bulto como resultado de la transferencia migratoria al nuevo mundo  durante   los  primeros  años de la  colonización y evangelización.

La Virgen María Bella Asunción de Arani es de Color Morena y la devoción a la imagen santa se popularizó en el valle de Cliza o el Valle Alto, pero no sólo entre estos pobladores sino también entre devotos del oriente principalmente de Santa Cruz de la Sierra, que en calidad de peregrinos llegaban al Villorio de Arani desde los    primeros días de agosto.

Al respecto, el gobernador intendente (F. de Viedma) en el tiempo colonial en su informe expresaba lo siguiente:

“Se  venera  una  imagen de María Santísima  con el título de nuestra  señora  la Bella  a quien toda   la provincia  y  sus inmediatas  tienen  particular devoción y  vienen muchas  gentes, en memoria a  cumplir  sus promesas  el día 24 de agosto se celebra  una  fiesta  solemne  en el culto de esta  sagrada  efigie  la que atrae  innumerable  concurso de gentes  y  con este  motivo  se  hace  feria  de géneros de Castilla  y de la tierra; y con las  limosnas  que  contribuyen  los  fieles  tienen la  fábrica y una dotación rica”. 

También en algunas crónicas coloniales refieren que llegaban devotos procedentes de Potosí y los peregrinos participaban en el inicio de la festividad con las vísperas del 14  de  Agosto  en la noche y la solemne misa   y procesión  del 15  de  agosto, luego el 23 de agosto día  de  feria  y calvario.

En la noche, la velada a la Virgen contaba con presencia de indígenas con velas encendidas y la adoración a la imagen con el ritmo de sus cajas, quenas y jula julas.

El   día 24 de agosto, la fiesta patronal de la parroquia en honor al apóstol San Bartolomé, era precedida de misas solemnes bendiciones y procesiones, costumbres traídas por los españoles que heredaron los rituales de la antigua Roma.

FACHADA NEOGÓTICA

FESTIVIDAD DE HOY

El 24 y 25 de agosto, actualmente, está matizado por la participación de danzarines inmersos  en el rico folklore místico  espiritual  y  cristiano convertido en una  rara  hibridación  o mestizaje  cultural religioso que  dieron  lugar a las fiestas paganas con  “misachicus” o presteríos  donde  no  falta la  “comida especial y la chicha especial.

 La festividad es de algarabía y  regocijo popular con  bailes, juegos pirotécnicos o lo  que  llamaban  antes  las  luminarias.  En las ferias  de agosto en Arani   se  vende  gran cantidad de cántaros ollas   y  enceres de  cerámica producidos por manos de alfareros  indígenas, venta de pan empanadas,  bizcochos, maní, watías o  calabazas al horno bateas  de  madera,  tutumas, cucharas de palo, instrumentos de labranza, etc. 

Lo pintoresco y clásico en Arani durante la  fiesta  de  agosto es la imponente presencia de  “las cholas”, ellas son  toda una institución, el alma  de  la raza  del pujante  mestizaje  étnico cultural y ultramarino.  Se las ve en el mercado realizando transacciones económicas utilizando “El Trueque” para obtener productos agrícolas que se comercian en esa época del año. 

Terminada la colonia, en la República se continuó con la costumbre en el siglo XX y esta fiesta al pasar el tiempo tuvo distintos matices según referencias registradas en el periódico “El Comercio” de 3 de septiembre de 1901.

“Se  hallan de vuelta  todos  los  industriales  que se  trasladaron  a Arani con motivo de la feria  por la fiesta  del 24 de agosto”;  referente al mismo  tema, la  crónica  escribía  lo siguiente  para la fiesta  de  Arani:  “numerosos pueblos y no pocos  comerciantes  se  preparan  a  trasladarse  a Arani  con  motivo de  la  fiesta que  celebra  esta  localidad  el 24 presente y la  feria  que  sigue  a la fiesta  dura  ocho días  y como  es  sabido  se  realizan en ella  importantes transacciones comerciales” 

De igual forma, el periódico  “El Heraldo” de 11 de agosto de 1909  informa:  “Que    la junta  municipal de Arani con motivo de la fiesta crea  la  plaza de ganado para la importación  de  ganado  vacuno que  estrenaría  el  14 de agosto  y para que cada sábado de cada semana se abra la feria”.

En el año de 1911, Arani ya estaba unida por la línea del ferrocarril del ramal Quillacollo Cochabamba Aiquile, Tarata, Cliza, Punata y Arani.  Por esa vía llegaron los mercaderes chinos y árabes con mercaderías ultramarinas quienes también instalaban sus puestos de venta en la plaza de Arani durante la fiesta de agosto. 

Años después, en el periódico “El Imparcial” de 30 de agosto de 1945 se registraba una terrible y trágica noticia: “en ocasión de la popular y  tradicional festividad  de la  Virgen Bella; se  produjo un gran accidente en la línea  férrea a la salida del pueblo;  el  tren de descarriló, chocaron  entre sí  dos  convoyes  provocando   la tragedia por el cual se  lamentó la muerte  de muchos pasajeros  así como igual  número de  heridos”.

Al mes siguiente, durante la presidencia del Tcnl. Don Gualberto Villarroel el 19 de septiembre de 1945, la Convención Nacional declaró al templo de Arani, Monumento Nacional y en su artículo único decía: 

“Declárese Monumento Nacional el Templo Colonial de la provincia de Arani del Distrito Eclesiástico de Cochabamba conforme al Art. N° 163 de la Constitución (C.P.E.).

 Desde aquel año en que se produjo ese  fatídico accidente la  fiesta  dejó de ser fastuosa y  grande. Decayó en todo su esplendor, nunca más llegaron los peregrinos de los llanos orientales de Santa Cruz de la Sierra y de Potosí.

Ahora se ha  convertido en una fiesta  del Valle  Alto y de todos sus  parajes  llegan los  campesinos en verdaderas  romerías y caravanas   procedentes de  Mizque y  Aiquile, quienes  traen a  vender sus  productos.

 Otra caravana de devotos llega en forma organizada por familias de Sacaba cada 22 de agosto a las primeras horas de la mañana y precedida de sus autoridades ingresa al templo de San Bartolomé de Arani.

Luego de escuchar la misa solicitan en calidad de préstamo la réplica de la imagen de la VIRGEN BELLA para llevarlo con rumbo al pueblo de Sacaba donde el 22 en la noche la santas imagen es venerada en la puerta de su templo y se realiza una verbena en honor a la Virgen con participación de todo el pueblo.

 Al día siguiente, día 23, retornan al pueblo de Arani devolviendo a la imagen sagrada presidido de una gran caravana de peregrinos sacabeños. En síntesis, esta fiesta religiosa es eminentemente rural agraria.

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Referencias

Archivo histórico municipal de Cochabamba

Archivo histórico departamental de la Gobernación

Libros de fábrica de los archivos eclesiásticos de San Bartolomé de Arani.

IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI
LÍNEA DEL FERROCARRIL
PANORAMICA DE ARANI, Foto: GAM Arani

OBISPOS Y LA GRAN OBRA

La gran obra comenzó por los cimientos y cuando la construcción llegó a la altura de la cripta, monseñor Bernardino de Cárdenas falleció el 20 de octubre de 1668. Solo por los años de 1743 a 1745 se termina la construcción de la iglesia durante la administración episcopal del obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani, monseñor su ilustrísima don Miguel Bernardino de la Fuente y Rojas.

El nuevo obispo mandó a continuar la construcción, siendo además benefactor de la obra. En su testamento destinó plata suficiente para la construcción del templo siendo su albacea testamentario y ejecutor de su última voluntad el corregidor y justicia mayor de la Villa de Oropesa, el Gral.  Bartolomé Fiorilo y Pérez (ARH.M.C.)

Pero, la obra tampoco se terminó totalmente por el fallecimiento del obispo el 15 de julio de 1743.  Hasta 1749, recién se terminó de construir el Baptisterio a cargo del arquitecto don Lucas de Cabral.

Luego, otro nuevo obispo, su ilustrísima monseñor Don Juan Pablo de Olmedo, que ejerció el cargo desde el año de 1745 a 1755, se encargó de dirigir la construcción de la torre y unas siete tiendas en la plaza, así como otros ambientes, pero tampoco se terminó por completo la edificación de la torre.

Sólo bajo el gobierno eclesiástico del obispo auxiliar del Obispado de Santa Cruz de la Sierra y primer párroco de Arani, su ilustrísima monseñor Dr. don Rafael de la Vara de la Madrid, que ejerció el cargo de 1780 a 1806, se concluyó la construcción de la torre entre 1783 a 1788.

 Para este trabajo se contrató al arquitecto don José Mejía y en 1785 se mandó a fundir una campana con el fundidor cliceño Don Vicente Chamarro.

Entre 1803 y 1804 fue dispuesto la fundición de las otras campanas, una mediana y otra mayor. Para ello se contrató al fundidor don Gregorio del Ramo y así fue concluida la Basílica de Arani Santuario Virgen Bella y bajo la protección del apóstol San Bartolomé. 

FACHADA NEOGÓTICA
IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI

La Iglesia tiene características peculiares, un modelo de Cruz Latina con Cúpula sobre el Crucero, parece hallarse cubierta por azulejos de varios colores trabajados en Huayculi, Anzaldo y Toco.

La fachada es neogótica es de principios del siglo XIX y la torre se encuentra separada de la iglesia que fue construida en el siglo XVIII.  En su interior se conservan admirables retablos estilo barroco; el altar mayor cubierto en su parte central por arcos de plata repujados y también ornamentados con pan de oro. Tienen los estilos Romano y Mudéjar, también   guardan valiosísimas pinturas al óleo con distintas advocaciones religiosas y retratos de los obispos de Santa Cruz de la Sierra. 

La sede episcopal, residencia y administración del obispado de Santa Cruz de la Sierra en Arani duró hasta el 25 de junio de 1847.

Según Crónicas Franciscanas, Arani tuvo una alta cultura colonial que en su día moraron ilustres prelados o gobernadores eclesiásticos, sabios y pastores gentiles. Hoy en día su gran iglesia se ha resignado a ser solamente un templo parroquial y en lugar de obispos sólo tiene párrocos. 

La provincia de Arani es de paisaje variado donde se yergue el culto por la Virgen la Imagen   de María La  Bella por  lo que ha sido y lo es  el imán de atracción de los  fieles  católicos en  romerías  que  llegan a su  Santuario con pasantes, alféreces,  prestes y  priostes.

EL ORIGEN DE LA DEVOCIÓN 

Se origina en la   devoción ibérica que llegó a Arani en el siglo XVI o principios del siglo XVII. Al respecto existen algunas teorías, unos entendidos dicen que se trata de una réplica traída de la Virgen de los Navegantes del puerto de Lepe de España y otros refieren que es   muy parecida a la “Bella Asunción” de los ojos grandes de Lugo del norte de España quienes trajeron la imagen en bulto como resultado de la transferencia migratoria al nuevo mundo  durante   los  primeros  años de la  colonización y evangelización.

La Virgen María Bella Asunción de Arani es de Color Morena y la devoción a la imagen santa se popularizó en el valle de Cliza o el Valle Alto, pero no sólo entre estos pobladores sino también entre devotos del oriente principalmente de Santa Cruz de la Sierra, que en calidad de peregrinos llegaban al Villorio de Arani desde los    primeros días de agosto.

Al respecto, el gobernador intendente (F. de Viedma) en el tiempo colonial en su informe expresaba lo siguiente:

“Se  venera  una  imagen de María Santísima  con el título de nuestra  señora  la Bella  a quien toda   la provincia  y  sus inmediatas  tienen  particular devoción y  vienen muchas  gentes, en memoria a  cumplir  sus promesas  el día 24 de agosto se celebra  una  fiesta  solemne  en el culto de esta  sagrada  efigie  la que atrae  innumerable  concurso de gentes  y  con este  motivo  se  hace  feria  de géneros de Castilla  y de la tierra; y con las  limosnas  que  contribuyen  los  fieles  tienen la  fábrica y una dotación rica”. 

También en algunas crónicas coloniales refieren que llegaban devotos procedentes de Potosí y los peregrinos participaban en el inicio de la festividad con las vísperas del 14  de  Agosto  en la noche y la solemne misa   y procesión  del 15  de  agosto, luego el 23 de agosto día  de  feria  y calvario.

En la noche, la velada a la Virgen contaba con presencia de indígenas con velas encendidas y la adoración a la imagen con el ritmo de sus cajas, quenas y jula julas.

El   día 24 de agosto, la fiesta patronal de la parroquia en honor al apóstol San Bartolomé, era precedida de misas solemnes bendiciones y procesiones, costumbres traídas por los españoles que heredaron los rituales de la antigua Roma.

FESTIVIDAD DE HOY

El 24 y 25 de agosto, actualmente, está matizado por la participación de danzarines inmersos  en el rico folklore místico  espiritual  y  cristiano convertido en una  rara  hibridación  o mestizaje  cultural religioso que  dieron  lugar a las fiestas paganas con  “misachicus” o presteríos  donde  no  falta la  “comida especial y la chicha especial.

 La festividad es de algarabía y  regocijo popular con  bailes, juegos pirotécnicos o lo  que  llamaban  antes  las  luminarias.  En las ferias  de agosto en Arani   se  vende  gran cantidad de cántaros ollas   y  enceres de  cerámica producidos por manos de alfareros  indígenas, venta de pan empanadas,  bizcochos, maní, watías o  calabazas al horno bateas  de  madera,  tutumas, cucharas de palo, instrumentos de labranza, etc. 

Lo pintoresco y clásico en Arani durante la  fiesta  de  agosto es la imponente presencia de  “las cholas”, ellas son  toda una institución, el alma  de  la raza  del pujante  mestizaje  étnico cultural y ultramarino.  Se las ve en el mercado realizando transacciones económicas utilizando “El Trueque” para obtener productos agrícolas que se comercian en esa época del año. 

Terminada la colonia, en la República se continuó con la costumbre en el siglo XX y esta fiesta al pasar el tiempo tuvo distintos matices según referencias registradas en el periódico “El Comercio” de 3 de septiembre de 1901.

“Se  hallan de vuelta  todos  los  industriales  que se  trasladaron  a Arani con motivo de la feria  por la fiesta  del 24 de agosto”;  referente al mismo  tema, la  crónica  escribía  lo siguiente  para la fiesta  de  Arani:  “numerosos pueblos y no pocos  comerciantes  se  preparan  a  trasladarse  a Arani  con  motivo de  la  fiesta que  celebra  esta  localidad  el 24 presente y la  feria  que  sigue  a la fiesta  dura  ocho días  y como  es  sabido  se  realizan en ella  importantes transacciones comerciales” 

De igual forma, el periódico  “El Heraldo” de 11 de agosto de 1909  informa:  “Que    la junta  municipal de Arani con motivo de la fiesta crea  la  plaza de ganado para la importación  de  ganado  vacuno que  estrenaría  el  14 de agosto  y para que cada sábado de cada semana se abra la feria”.

En el año de 1911, Arani ya estaba unida por la línea del ferrocarril del ramal Quillacollo Cochabamba Aiquile, Tarata, Cliza, Punata y Arani.  Por esa vía llegaron los mercaderes chinos y árabes con mercaderías ultramarinas quienes también instalaban sus puestos de venta en la plaza de Arani durante la fiesta de agosto. 

Años después, en el periódico “El Imparcial” de 30 de agosto de 1945 se registraba una terrible y trágica noticia: “en ocasión de la popular y  tradicional festividad  de la  Virgen Bella; se  produjo un gran accidente en la línea  férrea a la salida del pueblo;  el  tren de descarriló, chocaron  entre sí  dos  convoyes  provocando   la tragedia por el cual se  lamentó la muerte  de muchos pasajeros  así como igual  número de  heridos”.

Al mes siguiente, durante la presidencia del Tcnl. Don Gualberto Villarroel el 19 de septiembre de 1945, la Convención Nacional declaró al templo de Arani, Monumento Nacional y en su artículo único decía: 

“Declárese Monumento Nacional el Templo Colonial de la provincia de Arani del Distrito Eclesiástico de Cochabamba conforme al Art. N° 163 de la Constitución (C.P.E.).

 Desde aquel año en que se produjo ese  fatídico accidente la  fiesta  dejó de ser fastuosa y  grande. Decayó en todo su esplendor, nunca más llegaron los peregrinos de los llanos orientales de Santa Cruz de la Sierra y de Potosí.

Ahora se ha  convertido en una fiesta  del Valle  Alto y de todos sus  parajes  llegan los  campesinos en verdaderas  romerías y caravanas   procedentes de  Mizque y  Aiquile, quienes  traen a  vender sus  productos.

 Otra caravana de devotos llega en forma organizada por familias de Sacaba cada 22 de agosto a las primeras horas de la mañana y precedida de sus autoridades ingresa al templo de San Bartolomé de Arani.

Luego de escuchar la misa solicitan en calidad de préstamo la réplica de la imagen de la VIRGEN BELLA para llevarlo con rumbo al pueblo de Sacaba donde el 22 en la noche la santas imagen es venerada en la puerta de su templo y se realiza una verbena en honor a la Virgen con participación de todo el pueblo.

 Al día siguiente, día 23, retornan al pueblo de Arani devolviendo a la imagen sagrada presidido de una gran caravana de peregrinos sacabeños. En síntesis, esta fiesta religiosa es eminentemente rural agraria.

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Referencias

Archivo histórico municipal de Cochabamba

Archivo histórico departamental de la Gobernación

Libros de fábrica de los archivos eclesiásticos de San Bartolomé de Arani.

LÍNEA DEL FERROCARRIL
PANORAMICA DE ARANI, Foto: GAM Arani
IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI
FACHADA NEOGÓTICA

OBISPOS Y LA GRAN OBRA

La gran obra comenzó por los cimientos y cuando la construcción llegó a la altura de la cripta, monseñor Bernardino de Cárdenas falleció el 20 de octubre de 1668. Solo por los años de 1743 a 1745 se termina la construcción de la iglesia durante la administración episcopal del obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani, monseñor su ilustrísima don Miguel Bernardino de la Fuente y Rojas.

El nuevo obispo mandó a continuar la construcción, siendo además benefactor de la obra. En su testamento destinó plata suficiente para la construcción del templo siendo su albacea testamentario y ejecutor de su última voluntad el corregidor y justicia mayor de la Villa de Oropesa, el Gral.  Bartolomé Fiorilo y Pérez (ARH.M.C.)

Pero, la obra tampoco se terminó totalmente por el fallecimiento del obispo el 15 de julio de 1743.  Hasta 1749, recién se terminó de construir el Baptisterio a cargo del arquitecto don Lucas de Cabral.

Luego, otro nuevo obispo, su ilustrísima monseñor Don Juan Pablo de Olmedo, que ejerció el cargo desde el año de 1745 a 1755, se encargó de dirigir la construcción de la torre y unas siete tiendas en la plaza, así como otros ambientes, pero tampoco se terminó por completo la edificación de la torre.

Sólo bajo el gobierno eclesiástico del obispo auxiliar del Obispado de Santa Cruz de la Sierra y primer párroco de Arani, su ilustrísima monseñor Dr. don Rafael de la Vara de la Madrid, que ejerció el cargo de 1780 a 1806, se concluyó la construcción de la torre entre 1783 a 1788.

 Para este trabajo se contrató al arquitecto don José Mejía y en 1785 se mandó a fundir una campana con el fundidor cliceño Don Vicente Chamarro.

Entre 1803 y 1804 fue dispuesto la fundición de las otras campanas, una mediana y otra mayor. Para ello se contrató al fundidor don Gregorio del Ramo y así fue concluida la Basílica de Arani Santuario Virgen Bella y bajo la protección del apóstol San Bartolomé. 

LÍNEA DEL FERROCARRIL
PANORAMICA DE ARANI, Foto: GAM Arani

La Iglesia tiene características peculiares, un modelo de Cruz Latina con Cúpula sobre el Crucero, parece hallarse cubierta por azulejos de varios colores trabajados en Huayculi, Anzaldo y Toco.

La fachada es neogótica es de principios del siglo XIX y la torre se encuentra separada de la iglesia que fue construida en el siglo XVIII.  En su interior se conservan admirables retablos estilo barroco; el altar mayor cubierto en su parte central por arcos de plata repujados y también ornamentados con pan de oro. Tienen los estilos Romano y Mudéjar, también   guardan valiosísimas pinturas al óleo con distintas advocaciones religiosas y retratos de los obispos de Santa Cruz de la Sierra. 

La sede episcopal, residencia y administración del obispado de Santa Cruz de la Sierra en Arani duró hasta el 25 de junio de 1847.

Según Crónicas Franciscanas, Arani tuvo una alta cultura colonial que en su día moraron ilustres prelados o gobernadores eclesiásticos, sabios y pastores gentiles. Hoy en día su gran iglesia se ha resignado a ser solamente un templo parroquial y en lugar de obispos sólo tiene párrocos. 

La provincia de Arani es de paisaje variado donde se yergue el culto por la Virgen la Imagen   de María La  Bella por  lo que ha sido y lo es  el imán de atracción de los  fieles  católicos en  romerías  que  llegan a su  Santuario con pasantes, alféreces,  prestes y  priostes.

EL ORIGEN DE LA DEVOCIÓN 

Se origina en la   devoción ibérica que llegó a Arani en el siglo XVI o principios del siglo XVII. Al respecto existen algunas teorías, unos entendidos dicen que se trata de una réplica traída de la Virgen de los Navegantes del puerto de Lepe de España y otros refieren que es   muy parecida a la “Bella Asunción” de los ojos grandes de Lugo del norte de España quienes trajeron la imagen en bulto como resultado de la transferencia migratoria al nuevo mundo  durante   los  primeros  años de la  colonización y evangelización.

La Virgen María Bella Asunción de Arani es de Color Morena y la devoción a la imagen santa se popularizó en el valle de Cliza o el Valle Alto, pero no sólo entre estos pobladores sino también entre devotos del oriente principalmente de Santa Cruz de la Sierra, que en calidad de peregrinos llegaban al Villorio de Arani desde los    primeros días de agosto.

Al respecto, el gobernador intendente (F. de Viedma) en el tiempo colonial en su informe expresaba lo siguiente:

“Se  venera  una  imagen de María Santísima  con el título de nuestra  señora  la Bella  a quien toda   la provincia  y  sus inmediatas  tienen  particular devoción y  vienen muchas  gentes, en memoria a  cumplir  sus promesas  el día 24 de agosto se celebra  una  fiesta  solemne  en el culto de esta  sagrada  efigie  la que atrae  innumerable  concurso de gentes  y  con este  motivo  se  hace  feria  de géneros de Castilla  y de la tierra; y con las  limosnas  que  contribuyen  los  fieles  tienen la  fábrica y una dotación rica”. 

También en algunas crónicas coloniales refieren que llegaban devotos procedentes de Potosí y los peregrinos participaban en el inicio de la festividad con las vísperas del 14  de  Agosto  en la noche y la solemne misa   y procesión  del 15  de  agosto, luego el 23 de agosto día  de  feria  y calvario.

En la noche, la velada a la Virgen contaba con presencia de indígenas con velas encendidas y la adoración a la imagen con el ritmo de sus cajas, quenas y jula julas.

El   día 24 de agosto, la fiesta patronal de la parroquia en honor al apóstol San Bartolomé, era precedida de misas solemnes bendiciones y procesiones, costumbres traídas por los españoles que heredaron los rituales de la antigua Roma.

IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI
PANORAMICA DE ARANI, Foto: GAM Arani
FACHADA NEOGÓTICA
IMAGEN DE LA VIRGEN LA BELLA, Foto: RSM 88.2 ARANI

OBISPOS Y LA GRAN OBRA

La gran obra comenzó por los cimientos y cuando la construcción llegó a la altura de la cripta, monseñor Bernardino de Cárdenas falleció el 20 de octubre de 1668. Solo por los años de 1743 a 1745 se termina la construcción de la iglesia durante la administración episcopal del obispado de Santa Cruz de la Sierra con residencia en Arani, monseñor su ilustrísima don Miguel Bernardino de la Fuente y Rojas.

El nuevo obispo mandó a continuar la construcción, siendo además benefactor de la obra. En su testamento destinó plata suficiente para la construcción del templo siendo su albacea testamentario y ejecutor de su última voluntad el corregidor y justicia mayor de la Villa de Oropesa, el Gral.  Bartolomé Fiorilo y Pérez (ARH.M.C.)

Pero, la obra tampoco se terminó totalmente por el fallecimiento del obispo el 15 de julio de 1743.  Hasta 1749, recién se terminó de construir el Baptisterio a cargo del arquitecto don Lucas de Cabral.

Luego, otro nuevo obispo, su ilustrísima monseñor Don Juan Pablo de Olmedo, que ejerció el cargo desde el año de 1745 a 1755, se encargó de dirigir la construcción de la torre y unas siete tiendas en la plaza, así como otros ambientes, pero tampoco se terminó por completo la edificación de la torre.

Sólo bajo el gobierno eclesiástico del obispo auxiliar del Obispado de Santa Cruz de la Sierra y primer párroco de Arani, su ilustrísima monseñor Dr. don Rafael de la Vara de la Madrid, que ejerció el cargo de 1780 a 1806, se concluyó la construcción de la torre entre 1783 a 1788.

 Para este trabajo se contrató al arquitecto don José Mejía y en 1785 se mandó a fundir una campana con el fundidor cliceño Don Vicente Chamarro.

Entre 1803 y 1804 fue dispuesto la fundición de las otras campanas, una mediana y otra mayor. Para ello se contrató al fundidor don Gregorio del Ramo y así fue concluida la Basílica de Arani Santuario Virgen Bella y bajo la protección del apóstol San Bartolomé. 

La Iglesia tiene características peculiares, un modelo de Cruz Latina con Cúpula sobre el Crucero, parece hallarse cubierta por azulejos de varios colores trabajados en Huayculi, Anzaldo y Toco.

La fachada es neogótica es de principios del siglo XIX y la torre se encuentra separada de la iglesia que fue construida en el siglo XVIII.  En su interior se conservan admirables retablos estilo barroco; el altar mayor cubierto en su parte central por arcos de plata repujados y también ornamentados con pan de oro. Tienen los estilos Romano y Mudéjar, también   guardan valiosísimas pinturas al óleo con distintas advocaciones religiosas y retratos de los obispos de Santa Cruz de la Sierra. 

La sede episcopal, residencia y administración del obispado de Santa Cruz de la Sierra en Arani duró hasta el 25 de junio de 1847.

Según Crónicas Franciscanas, Arani tuvo una alta cultura colonial que en su día moraron ilustres prelados o gobernadores eclesiásticos, sabios y pastores gentiles. Hoy en día su gran iglesia se ha resignado a ser solamente un templo parroquial y en lugar de obispos sólo tiene párrocos. 

La provincia de Arani es de paisaje variado donde se yergue el culto por la Virgen la Imagen   de María La  Bella por  lo que ha sido y lo es  el imán de atracción de los  fieles  católicos en  romerías  que  llegan a su  Santuario con pasantes, alféreces,  prestes y  priostes.

. Redacción:
Edmundo Arze

Abogado, Investigador e Historiador Cochabambino. Miembro de la Sociedad de Editores y Redactores SER Cochabamba

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